Valentina una mujer de
46 años, separada de su marido desde hace dos años y tiene una hija de 23 años,
que estudia en el extranjero.
Valentina trabajaba de
secretaria en una empresa de Sevilla y estaba constantemente de un lado para
otro. Varias tardes a la semana, solía ir a clase de salsa con sus amigas para
evadirse del estrés que le suponía todo el día de trabajo.
Tras tres meses de rehabilitación
en el hospital, Valentina acude un fisioterapeuta privado para ampliar sus
sesiones. La paciente nos cuenta qué ocurrió el día de la caída: “me dirigía al
trabajo en bicicleta, y de momento se me cruzó algo en el camino, perdí el
equilibrio y me caí. En ese momento noté un crujido enorme en la rodilla y en
el hombro. No podía levantarme, no tenía fuerzas para nada. Gracias a un
muchacho que pasaba por allí, pude incorporarme y llamaron a la ambulancia
rápidamente para que vinieran a ayudarme.
Me puse bastante
nerviosa y no recuerdo muy bien lo que pasó desde que el muchacho avisó a la
ambulancia hasta que esta llegó. Lo próximo que recuerdo es que me hicieron
bastantes pruebas y estuve más de un mes con un cabestrillo, y sin poder cargar
peso en la pierna mala.
Ahora estoy mucho
mejor, pero el dolor del hombro no se me quita y cada vez lo noto más duro. Ya camino
con una muleta solo, pero intento no cogerla porque me apoyo en el brazo malo".
El fisioterapeuta lee
el diagnóstico médico y tras realizar la exploración física, valoración
funcional y analítica, determina que la paciente presenta secuela de fractura
de troquín y diafisaria de fémur.
Debido a la
inmovilización, ha perdido bastante tono muscular en su brazo derecho y pierna izquierda
con punto gatillo en la V deltoidea, y presenta una amplitud de movimiento
disminuida en el brazo derecho. A consecuencia de la debilidad del glúteo
medio, el paciente tiene un patrón de marcha en trendelemburg.
El dolor que presenta
es de tipo mecánico e inflamatorio y corresponde a 7/10 en la Escala EVA.
Tras realizar el Índice de Barthel se obtiene una
puntuación de 70/100, presentando una dificultad al peinarse, cocinar y
vestirse. Además, le cuesta caminar durante un largo periodo de tiempo. Pinche aquí si quiere ver el cuestionario que representa este índice:
Valentina comenta al
fisioterapeuta que ya no puede asistir a sus clases de salsa, y actualmente no
puede continuar con su trabajo. Pese a esto, Valentina se encuentra con fuerzas
para continuar con su rehabilitación y poder retomar su rutina lo antes posible.
Además, su hija vuelve en unas semanas y podrá ayudarla con las tareas de la casa
y en aquellas actividades más complejas.
A continuación adjunto el análisis según la CIF: análisis según la CIF
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